En biología se dice que una
población o especie ha sufrido una
situación de cuello de botella cuando ha experimentado un drástico
descenso en el número de miembros en algún momento del pasado, llegando en
algunos casos a estar al borde de la extinción. Como consecuencia, los ejemplares de las generaciones
posteriores al cuello de botella presentan una escasa variabilidad genética y
la antigua proporción de alelos en el conjunto de la población ha cambiado
considerablemente.
Los cuellos[KS2] de
botella aceleranla deriva genética y la evolución de
las especies que los experimentan de forma considerable, pues se produce
una selección intensiva de determinados
caracteres que pasan a ser mayoritarios en los individuos
supervivientes, mientras que otros menos
favorables se reducen o desaparecen por completo (a menos que el cuello de
botella haya sido causado de forma no natural, por ejemplo, mediante la caza o
tala masiva de árboles practicada por la especie humana).
Un ejemplo típico
de cuello de botella natural es
el que sufrió el guepardo (Acinonyx jubatus) durante las glaciaciones del Pleistoceno. En épocas precedentes, los guepardos estaban
mucho más diversificados y eran más abundantes, tanto que su área de
distribución abarcaba toda África, gran parte de Eurasia e incluso América del Norte. De entre las distintas especies de guepardos que existieron
en el Plio-Pleistoceno, la que dio lugar al guepardo actual
fue Acinonyx pardinensis, un animal de gran tamaño, más robusto pero menos
veloz que el actual, disperso por África, sur de Europa y Oriente Medio. Con
la llegada de los hielos, gran parte del hemisferio norte se congeló o pasó a
un clima frío (taiga, tundra, estepa), mientras que
en las regiones tropicales, la falta de agua retenida en los glaciares polares
provocó un clima más seco. Como consecuencia, la mayor parte de los guepardos
se extinguieron y sólo quedaron unos pocos miles de A. pardinensis (o
quizá, sólo unos cientos) en Oriente Próximo y parte de África, mucho más
delgados y estilizados (para consumir menos recursos) y veloces (para
cazar animales pequeños y rápidos, más abundantes en condiciones de escasez)
que la forma característica de la especie original. Habían perdido rápidamente
muchos caracteres hasta entonces normales, que fueron sustituidos por otrosraros (delgadez,
tamaño pequeño, mayor velocidad) que hasta entonces eran eliminados o
simplemente pasados por alto por la selección natural, y que ahora eran
precisamente los más adecuados para sobrevivir. En la actualidad, la nueva
especie resultante, Acinonyx jubatus, es uno de los mamíferos con menor diversidad génica, hasta el punto de que los individuos
de esta especie son fácilmente contagiables de enfermedades por otros y que apenas
sufren rechazo de órganos cuando se les trasplantan. Por si fuera poco, el guepardo ha sido cazado y
expulsado de diversas zonas debido al avance de la agricultura, disminuyendo
aún más su población.
CUELLOS DE BOTELLAS ARTIFICIALES:
Esto último es un fenómeno que afecta o ha afectado a multitud de
especies y poblaciones en tiempos recientes, que han sufrido un cuello de
botella artificial. Dado que en el caso de la persecución humana no
se tiende a matar a los individuos con ciertas características sino que se
persigue a todos por igual, los descensos de población son aún más rápidos que
en los cuellos de botella naturales y no llevan parejos una selección
marcada de los caracteres de los mismos.
La diversidad[KS4] genética en estos animales es
reducidísima, hasta el punto de que en el bisonte europeo, por ejemplo, sólo existen actualmente dos tipos de cromosoma sexual masculino .
CUELLOS DE BOTELLA Y EVOLUCION HUMANO:
Las catástrofes naturales y cósmicas también pueden causar extinciones y
cuellos de botella, a las que no escapa ni siquiera la especie humana. De acuerdo con lamoderna teoría de la catástrofe de Toba, la macro erupción del supe
volcán Toba, en Indonesia, hoy reducido a un lago de
cráter y que se calcula que tuvo una potencia
superior en 3.000 veces a la del Monte Santa Helena, hizo disminuir la población
humana mundial hasta unos pocos miles de individuos hace 75.000 años. En la misma época[KS5] , muchas otras especies
sufrieron también un descensovariable en su población.
Y es que los humanos no son inmunes a los cuellos de botella, y el del
Toba no ha sido el único que Homo sapiens sufrió a lo largo de su historia.
[KS1]El efecto fundador se
produce cuando unos pocos miembros de la población original establecen una
colonia. Este pequeño tamaño poblacional implica que la colonia puede tener:
- poca variabilidad genética, respecto a la
población original.
- una muestra no aleatoria de los genes de la
población original.
[KS2]Una disminución de la variabilidad genética implica que la
población puede no adaptarse a las nuevas presiones selectivas, como el cambio
climático o un cambio en los recursos disponibles, debido a que la variabilidad
genética sobre la que actuaría la selección puede haber desaparecido ya de la
población.
[KS3]Cuando el tamaño de una población se reduce durante al menos
una generación, se porduce un cuello de botella poblacional. Debido a que la
deriva genética actúa más rápidamente reduciendo la variabilidad genética en
las poblaciones pequeñas, pasar por un cuello de botella puede hacer que
disminuya mucho la variabilidad genética de una población, incluso aunque el
cuello de botella no dure muchas generaciones. Las bolsas de canicas de más
abajo ejemplifican este proceso, donde, en la generación 2, una extracción
singularmente pequeña crea un cuello de botella.
[KS4]Ejemplos de animales que han pasado por cuellos de botella debido a la
persecución humana los tenemos en el elefante
marino del norte (150.000 ejemplares descendientes
de sólo 20 cuando se prohibió su caza en 1884), el bisonte europeo (3.600 descendientes de 12), el bisonte
americano (370.000 de 750), el hámster sirio y las tortugas
gigantes de las Islas
Galápagos.
[KS5]Durante la Edad Media, la peste
negra redujo un tercio la población europea de la
época. Otro tanto le pasó a la de Islandia durante una gran erupción del Hekla en 1783 (unida a pestes y hambrunas), que acabó con el 20% de la población
y aumentó la frecuencia de enfermedades genéticas entre los habitantes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario